Attipas se lanzó en 2011 después de 7 años de investigación cooperativa y desarrollo llevado a cabo en conjunto con el Centro de Desarrollo Conductual Cognitivo de la Universidad de Seúl, Corea del Sur.

Fue desarrollado en base al conocimiento biomecánico del desarrollo cerebral del bebé, por lo que permite a los niños pequeños sentir el entorno que está bajo la suela de sus zapatos, y mover sus pies y deditos con total libertad gracias a su característica puntera. 

Es un calzado diseñado simplemente para proteger el pie del bebé cuando el entorno o el clima no permite al bebé ir descalzo, un calzado respetuoso que sólo protege, sin interferir en la pisada y permitiendo un correcto desarrollo del pie del bebé. Un calzado que proporciona libre movimiento y es por tanto lo más parecido a ir descalzo.